Viviendo la vida. Tabla colores políticos
Aug. 11th, 2011 03:03 pm![[personal profile]](https://www.dreamwidth.org/img/silk/identity/user.png)
Fandom: Viviendo la vida
Claim: General
Número: 01.- Amarillo
- Es amarillo.
Yukiy afirma, sin levantar la vista de los cuadernos donde hace los deberes escolares.
- Yo creía que era rojo. - Kaori infla las mejillas, haciendo un puchero, dibujando en la orilla de su cuaderno, reacia a comenzar la tarea.
- ¿Tú de qué color dices que es el sol, Arjed? - Pregunta Joseph, estirándose un poco, respirando el aire del parque en que están.
- ... Yo lo veo transparente... - Responde
Marshall le pone una mano en la cabeza, haciéndole bajar la vista.
- No mires al sol, idiota.
No pueden evitar soltar la risa.
Número: 02.- Azul
Kaori observa las flores azules entre sus manos. Felicias, cree que son y se las ha regalado Arjed.
- Arjed, yo no...
Le duele decirlo y desea llorar, pero si él no está llorando, ella no tiene el derecho a hacerlo.
- Lo entiendo. No te pedí que correspondieras.
¿Por qué no luchas?
- Creo que es mejor. Ya sabes, el tiempo se me acaba. Si me amaras, sufrirías mucho.
¿Por qué te rindes así?
- Pero prométeme una cosa. Di que las conservarás.
Asiente. Joder, odia las flores. Peor aún, odia el azul.
Debió hacerlo a propósito, el cabrón.
Número: 03.- Blanco
El día es soleado, el sol parece burlarse de ellos.
Kaori se recoge el cabello; ata con firmeza la corona de fenicias que hace tiempo confeccionó. Joseph no quiere ir. A Yukiy el dolor le invade, el vacío se le abre paso en el corazón. Marshall no habla. Natasha llora.
El cementerio huele a tierra húmeda y junto a al fosa está la tierra arrancada de su seno para cavar ese hueco. Cientos de lápidas se alzan alrededor y algunos ángeles de mármol gastado les miran.
Todos visten de negro en el funeral.
Sólo el ataúd de Airon es blanco.
Número: 04.- Gris
A Yukiy le gustan los ojos de Natasha. Le gusta la mirada suave que tiene y la sonrisa que acompaña el brillo de ésta.
Le gustan los de Joseph, porque le parecen siempre contentos, sinceros. Los de Kaori son pícaros y alegres.
Pero los que más ama, son los de Arjed. Son puros, inocentes. Son color grisáceo, como las nubes de tormenta que en ocasiones ha visto derramarse. Tiene pestañas cortas y rizadas, que desearía contar algún día y ver si en realidad son tantas.
Yukiy adoraba a Arjed.
Por eso toda su infancia, fue el gris su color favorito.
Número: 05.- Marrón
- ¿Cuál es la diferencia entre café y marrón?
- Café es el que bebe mamá.
Kaori frunce el ceño, molesta ante la broma de su hermano y su vista se clava ahora en Marshall, decidida a ignorar olímpicamente a Edward.
- Marshy...
- Pues... Supongo que la misma que hay entre rojo y carmesí.
- ¿Eh?
- Deben ser las tonalidades.
- ¿Eh?
Edward no puede aguantar más la risa.
- Café es esto. - Señala un crayón. - Y marrón son tus ojos.
- ¡Gracias!
Como si nada, se marcha. Marshall suspira.
- Creo que entendió
- Iluso.
Número: 06.- Naranja
- ¿Quieres?
Arjed aparta la vista de la ventana, viendo a su amigo que le sonríe amablemente, desviándola hacia la naranja que Yukiy sostiene en sus manos.
- No tengo hambre.
- La pelaré por ti.- Anuncia, quitando la cáscara del fruto.
- No voy a salir de esta...
No quiere escuchar.
- Los médicos dicen que todo se acabó.
No sabe qué decir.
- Tengo miedo.
La naranja rueda en el suelo cuando Yukiy pierde sus fuerzas y las que tiene las usa para abrazar a su amigo.
- No me dejes solo, por favor...
No quiere dejarlo ir.
Número: 07.- Negro
- Me gustan las supernovas.
Joseph observa el cielo nocturno desde la azotea de la casa de Yukiy.
- Yo prefiero su evolución, - Arjed habla, cerrando los ojos un momento, conteniendo el bostezo que quiere salir, porque es tarde y tiene sueño.- Los hoyos negros.
- ¿Realmente son negros?
- Afroamericanos, hombre.- "rectifica" Yukiy.- No seas racista.
- Ya.
- Yukiy prefiere los soles -, habla Arjed. El aludido asiente.- ¿Y tú, Marshall?
- Mi ego.
- Tu ego no es astro.
- No, mi ego es la esfera que contiene al universo.
Prefieren callar o musitar "sin comentarios".
Número: 08.- Rojo
- Yo no creo en eso.
Natasha le mira fijamente, llevándose una mano al cabello, acomodándolo.
- ¿No?
- Sería triste si existiese algo como el hilo rojo del destino.
- ¿Por qué triste?
- Piénsalo. Tu hilo está atado a alguien más. Si mueres, ¿no quedará la otra persona sola por siempre?
Natasha sonríe amargamente. Entiende bien lo que su amigo quiere decir.
Arjed alza la mano, observándola a contraluz. La risita que suelta a Natasha le duele.
- Mi hilo no es rojo. Es azul y está suelto.
- Dijiste que no creías en eso.
- No creo.
Número: 09.- Verde
A Joseph le gusta salir de paseo.
Corre de un lado a otro, se retrepa en árboles, se abraza de sus ramas y recoge flores que regalará a las damas.
Entre el verdor del campo, se siente libre.
- Joseph, ya no subas más.
Yukiy le habla desde una rama baja del árbol que trepan ahora. El árbol tiene pequeños frutos, verdes y duros que Joseph usa para golpear a su amigo.
- Te espero en la cima, cobarde.
Yukiy gruñe, pero continúa el ascenso.
Más abajo, al píe del árbol, Arjed y Kaori observan.
- Se caerán.
- Amén.
Claim: General
Número: 01.- Amarillo
- Es amarillo.
Yukiy afirma, sin levantar la vista de los cuadernos donde hace los deberes escolares.
- Yo creía que era rojo. - Kaori infla las mejillas, haciendo un puchero, dibujando en la orilla de su cuaderno, reacia a comenzar la tarea.
- ¿Tú de qué color dices que es el sol, Arjed? - Pregunta Joseph, estirándose un poco, respirando el aire del parque en que están.
- ... Yo lo veo transparente... - Responde
Marshall le pone una mano en la cabeza, haciéndole bajar la vista.
- No mires al sol, idiota.
No pueden evitar soltar la risa.
Número: 02.- Azul
Kaori observa las flores azules entre sus manos. Felicias, cree que son y se las ha regalado Arjed.
- Arjed, yo no...
Le duele decirlo y desea llorar, pero si él no está llorando, ella no tiene el derecho a hacerlo.
- Lo entiendo. No te pedí que correspondieras.
¿Por qué no luchas?
- Creo que es mejor. Ya sabes, el tiempo se me acaba. Si me amaras, sufrirías mucho.
¿Por qué te rindes así?
- Pero prométeme una cosa. Di que las conservarás.
Asiente. Joder, odia las flores. Peor aún, odia el azul.
Debió hacerlo a propósito, el cabrón.
Número: 03.- Blanco
El día es soleado, el sol parece burlarse de ellos.
Kaori se recoge el cabello; ata con firmeza la corona de fenicias que hace tiempo confeccionó. Joseph no quiere ir. A Yukiy el dolor le invade, el vacío se le abre paso en el corazón. Marshall no habla. Natasha llora.
El cementerio huele a tierra húmeda y junto a al fosa está la tierra arrancada de su seno para cavar ese hueco. Cientos de lápidas se alzan alrededor y algunos ángeles de mármol gastado les miran.
Todos visten de negro en el funeral.
Sólo el ataúd de Airon es blanco.
Número: 04.- Gris
A Yukiy le gustan los ojos de Natasha. Le gusta la mirada suave que tiene y la sonrisa que acompaña el brillo de ésta.
Le gustan los de Joseph, porque le parecen siempre contentos, sinceros. Los de Kaori son pícaros y alegres.
Pero los que más ama, son los de Arjed. Son puros, inocentes. Son color grisáceo, como las nubes de tormenta que en ocasiones ha visto derramarse. Tiene pestañas cortas y rizadas, que desearía contar algún día y ver si en realidad son tantas.
Yukiy adoraba a Arjed.
Por eso toda su infancia, fue el gris su color favorito.
Número: 05.- Marrón
- ¿Cuál es la diferencia entre café y marrón?
- Café es el que bebe mamá.
Kaori frunce el ceño, molesta ante la broma de su hermano y su vista se clava ahora en Marshall, decidida a ignorar olímpicamente a Edward.
- Marshy...
- Pues... Supongo que la misma que hay entre rojo y carmesí.
- ¿Eh?
- Deben ser las tonalidades.
- ¿Eh?
Edward no puede aguantar más la risa.
- Café es esto. - Señala un crayón. - Y marrón son tus ojos.
- ¡Gracias!
Como si nada, se marcha. Marshall suspira.
- Creo que entendió
- Iluso.
Número: 06.- Naranja
- ¿Quieres?
Arjed aparta la vista de la ventana, viendo a su amigo que le sonríe amablemente, desviándola hacia la naranja que Yukiy sostiene en sus manos.
- No tengo hambre.
- La pelaré por ti.- Anuncia, quitando la cáscara del fruto.
- No voy a salir de esta...
No quiere escuchar.
- Los médicos dicen que todo se acabó.
No sabe qué decir.
- Tengo miedo.
La naranja rueda en el suelo cuando Yukiy pierde sus fuerzas y las que tiene las usa para abrazar a su amigo.
- No me dejes solo, por favor...
No quiere dejarlo ir.
Número: 07.- Negro
- Me gustan las supernovas.
Joseph observa el cielo nocturno desde la azotea de la casa de Yukiy.
- Yo prefiero su evolución, - Arjed habla, cerrando los ojos un momento, conteniendo el bostezo que quiere salir, porque es tarde y tiene sueño.- Los hoyos negros.
- ¿Realmente son negros?
- Afroamericanos, hombre.- "rectifica" Yukiy.- No seas racista.
- Ya.
- Yukiy prefiere los soles -, habla Arjed. El aludido asiente.- ¿Y tú, Marshall?
- Mi ego.
- Tu ego no es astro.
- No, mi ego es la esfera que contiene al universo.
Prefieren callar o musitar "sin comentarios".
Número: 08.- Rojo
- Yo no creo en eso.
Natasha le mira fijamente, llevándose una mano al cabello, acomodándolo.
- ¿No?
- Sería triste si existiese algo como el hilo rojo del destino.
- ¿Por qué triste?
- Piénsalo. Tu hilo está atado a alguien más. Si mueres, ¿no quedará la otra persona sola por siempre?
Natasha sonríe amargamente. Entiende bien lo que su amigo quiere decir.
Arjed alza la mano, observándola a contraluz. La risita que suelta a Natasha le duele.
- Mi hilo no es rojo. Es azul y está suelto.
- Dijiste que no creías en eso.
- No creo.
Número: 09.- Verde
A Joseph le gusta salir de paseo.
Corre de un lado a otro, se retrepa en árboles, se abraza de sus ramas y recoge flores que regalará a las damas.
Entre el verdor del campo, se siente libre.
- Joseph, ya no subas más.
Yukiy le habla desde una rama baja del árbol que trepan ahora. El árbol tiene pequeños frutos, verdes y duros que Joseph usa para golpear a su amigo.
- Te espero en la cima, cobarde.
Yukiy gruñe, pero continúa el ascenso.
Más abajo, al píe del árbol, Arjed y Kaori observan.
- Se caerán.
- Amén.